En el primer día de la aplicación de la Norma Emergente de Verificación Vehicular, fueron sancionados 11 automovilistas cuyos vehículos rebasaron los límites permisibles de contaminantes en el Estado de México.
El primer sensor remoto que mide las concentraciones de contaminantes de vehículos a diésel y a gasolina fue instalado en Circuito Pintores, entre Periférico y Gustavo Baz, Naucalpan, en donde se evaluaron 2 mil 500 vehículos, resultando en 9 remitidos al corralón por registrar altos niveles de óxidos de nitrógeno e hidrocarburos.
El segundo sensor se colocó en la caseta de Tepozotlán, en la autopista México-Querétaro, evaluándose 669 vehículos, dichos sensores funcionan gracias a un haz de luz infrarrojo emitido a lo largo de una trayectoria a través de una vialidad específica, a altura del tubo de escape de gases de los vehículos y hacia una serie de detectores que miden la concentración de de HC, CO, CO2.